Por: Keila Ilueca y Mayberlyn Macias
Estudiantes de Ingeniería Industrial
Universidad del Atlántico

Uno de los desafíos que muchos países en el mundo enfrentan es el logro de un verdadero equilibrio entre su crecimiento productivo, la calidad de vida y el bienestar de sus ciudadanos, gracias a esta necesidad nace el sector social, mayormente representado por Entidades sin Ánimo de Lucro o ESAL por sus siglas en español, quienes contribuyen a equilibrar la balanza en temas de equidad e igualdad socio-económicas en el mundo, según lo mencionado por Grosso Rincón.

Sin embargo, según Hoyos y Valencia, estas entidades no han tenido el camino fácil para lograrlo, ya que se han visto seriamente afectadas a la hora de desarrollar estrategias de innovación y posicionamiento competitivo frente a empresas de carácter lucrativo. Adicionalmente, las condiciones de crecimiento resultan más desalentadoras para entidades que están en una etapa inicial de consolidación, considerando que estas necesitan de conocimientos sólidos para desarrollar una determinada actividad económico-social, gestionar su operación y crecer a través del tiempo. Sumado a esto, la situación actual del COVID-19 en Colombia ha incrementado los índices de pérdidas económicas y la clausura de muchas empresas, de manera que una parte de las empresas del país se dieron a la obligación de continuar sus labores a través de procesos digitales de teletrabajo para amortiguar futuras pérdidas, como se evidencia en la Encuesta de Ritmo Empresarial. Es por esto que el presente artículo pretende brindar recomendaciones a las Entidades sin Ánimo de Lucro prematuras, con el fin de que sean capaces de adaptar claves de éxito en sus procesos y asegurar su perdurabilidad empresarial a lo largo del tiempo. A continuación, se mencionan los 3 pasos claves para contribuir al éxito de una organización no lucrativa:

1. Definir un nicho:

Para esto es esencial hacer la distinción de qué grupo de personas se identificarán como clientes y quiénes se identificarán como usuarios beneficiarios. Los clientes son aquellos que facilitarán, por medio de recursos públicos, privados o en modalidad de donación, la entrega del servicio o el producto ofrecido. Por otro lado, los usuarios beneficiarios serán aquellas comunidades que gozarán y recibirán, sin ningún costo, el servicio o el producto que brinda la ESAL para satisfacer sus necesidades. En otras palabras, los usuarios beneficiarios serán “la razón de ser” de las ESALES, mientras que los clientes serán quienes faciliten que las ESALES aporten a las comunidades.

2. Automatizar los procesos:

En este paso es importante establecer las actividades claves de la entidad e integrar soluciones de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones que permitan delegar funciones y evitar la realización de tareas repetitivas. Las herramientas tecnológicas deben ser compatibles con el tercer sector y elegidas de acuerdo a las necesidades y áreas de cada ESAL, aprovechando los recursos digitales gratuitos que ofrecen diferentes entidades, al tiempo que la ESAL se desenvuelve y gana terreno en el entorno digital.

3. Apalancarse mediante la oferta de valor:

Las principales opciones de apalancamiento que tiene una ESAL son los recursos públicos o privados, los recursos de cooperación internacional, las donaciones y los recursos de comercio. Las tres primeras son un beneficio inherente por ser una ESAL, gracias a su condición de caridad. Sin embargo, también por ser empresa, las entidades pueden hacer un ejercicio comercial a través de la oferta de productos y servicios. Para las opciones comerciales, se pueden percibir ingresos a través de venta directa, venta por suscripción, promociones o por regalías.

No obstante, en este paso cabe mencionar que la oferta de valor debe cumplir con los requerimientos que las personas necesitan, además que estas pueden presentar características innovadoras que solventen necesidades existentes o inexistentes del mercado, incluso pueden ser parecidas a ofertas existentes, pero con atributos diferenciadores o mejores rendimientos de un producto o servicio.

Como conclusión, es importante que cada ESAL comprenda que el lucro no está en cómo se generan ingresos, sino en cómo se gasta o se invierte cuando ya se tiene. Por consiguiente, hay muchas actividades claves para hacer crecer a una organización no lucrativa, una de las más importantes es la inversión tecnológica, la cual es imprescindible para la supervivencia y crecimiento de una empresa, sobre todo en un mundo que atraviesa por constantes cambios tecnológicos día a día.