Por: Juan Carlos Martínez Torres
Consultor en Innovación
Corporación MAVI
Un monoplaza de fórmula 1, es una maquina compleja, tan solo el chasis cuenta con alrededor de 11 mil componentes, el motor cuenta con 6 mil, y la electrónica con unos 500.000 componentes aproximadamente. A esta peculiar complejidad se debe sumar la inversión económica que tienen estos vehículos, pues las escuderías encargadas de fabricarlos gastan entre 100 mil a 400 mil millones de dólares, para ser los más rápidos en los 20 o 22 diferentes grandes premios donde se presentan. Por lo que cada escudería debe funcionar como un reloj perfectamente aceitado para no quedarse atrás.
La velocidad es importante en este deporte, y es que hace años un auto de fórmula 1 supera los 300 Km/h, sin embargo, mantener esas velocidades en una pista durante poco menos de 2 horas es mecánicamente un reto, también se debe tener en cuenta que una pista de carreras no es una línea recta, tampoco es un ovalo, por lo tanto, alcanzar dichos niveles de velocidad es demasiado complicado.
En la actualidad, el record de velocidad en pista de una auto fórmula 1, está en 378 km/h realizado en el trazado de Baku por Valtteri Bottas a bordo de un Williams, superando el record anterior del Colombiano Juan Pablo Montoya de 372 Km/h a bordo de un McLaren en la pista de Monza. Sin embargo, el equipo Bar-Honda llego a registrar 413 km/h en las salinas de Bonneville, en Utah, Estados Unidos, lamentablemente, al momento de realizar las pruebas oficiales se quedaron con un registro de 397 km/h, gracias a las condiciones de viento de ese día.
Todos los equipos son constructores, es decir que construyen sus propias piezas, y todos buscan lo mismo, ser los más rapidos, de allí que la Federación Internacional del Automovil (FIA), constantemente regula la capacidad de las escuderías para desarrollar motores o componentes específicos que permitan al vehículo alcanzar velocidades aún mayores.
Es difícil saber a ciencia cierta cuánto del presupuesto de las escuderías se invierte en nuevos desarrollos, es decir en I+D, y por supuesto en innovación, básicamente porque gran parte del presupuesto se invierte en mejorar diversos componentes. Dichas tecnologías desarrolladas para automóviles de fórmula 1, claramente terminan siendo incorporadas de cierta forma en súper autos que estas marcas venden para uso de calle, sin embargo, no todas las tecnologías terminan en los vehículos, muchas de ellas terminan mucho más cerca de lo que creemos.
Repasemos algunas de las tecnologías que se han desarrollado a partir de la máxima competencia del automovilismo:
El NOMEX: este material desarrollado por Dupont es resistente al calor y a las llamas, se utiliza en prendas y telas, además de otras diversas aplicaciones. Por sus características este material es utilizado por más de 3 millones de bomberos en todo el mundo, además de pilotos militares y tripulación de vehículos de combate; pilotos de automovilismo, entre otras profesiones.
El sistema de recuperación de energía cinética KERS (Kinetic Energy Recovery System): En un fórmula 1, el KERS permite al vehículo almacenar la energía provocada en las frenadas y utilizarlo para entregar mayor potencia al motor por un pequeño periodo de tiempo. Esta tecnología se utiliza actualmente en vehículos híbridos, donde el auto puede desplazarse sin utilizar nada de gasolina durante varios kilómetros. Una de las escuderías que más aportan al constante desarrollo de esta tecnología es Williams, y actualmente se está implementando para buses, trenes y metros.
Los FRENOS DE DISCO: Colin Chapman, creador de Lotus, introdujo estos frenos durante la década de los 60, posteriormente todas las escuderías las utilizarían para competir. Por lo que estos frenos se desarrollaron rápida y eficientemente, logrando una mayor ventilación con un menor peso y tamaño que los frenos de tambor antes utilizados. En la actualidad estos frenos no solo son usados en vehículos convencionales, también son usados en los sistemas de frenado de los aviones.
La FIBRA DE CARBONO: Si bien la fibra de carbono no fue desarrollada por la fórmula 1, la incorporación de esta tecnología por McLaren en los años 80 propago su uso en la competición, por lo que, a partir allí, su uso permitió que muchas otras tecnologías evolucionaran. La fibra de carbono cuenta con una dureza superior a la del acero, pero con un peso inferior al del plástico y una gran resistencia a altas temperaturas. Hoy en día este material se encuentra en aviones, bicicletas de competición o las patillas de las gafas.
CAPSULA DE SUPERVIVENCIA: la Babypod II se trata de una incubadora portátil de 8 kilos para recién nacidos, un equipo que recrea las condiciones de un útero materno de manera artificial y que no tiene ningún componente metálico, por lo que puede utilizarse en radiografías. Y que basa su diseño en la capsula de supervivencia de un monoplaza de fórmula 1 que puede resistir sin deformarse, impactos de 55km/h, además, es capaz de mantener la temperatura constante en el interior.
Amortiguadores: Los autos de Fórmula 1 utilizan amortiguadores hidráulicos para limitar el rebote del vehículo sobre superficies irregulares. Ingenieros de McLaren modificaron esta tecnología para ser un dispositivo de protección de las rodillas en casos donde se soportan grandes fuerzas por poco tiempo. Un ejemplo de estos son los marines de los Estados Unidos que hacen uso de embarcaciones militares inflables, en este caso las rodillas absorben un impacto equivalente a saltar de 2,5 pisos de altura, con una frecuencia de pocos segundos. Adicionalmente esta tecnología se utiliza para apoyar la rodilla después de cirugías.
Telemetría: Un auto de fórmula 1, con tantos componentes y diferentes configuraciones, produce una gran cantidad de datos que son analizados en tiempo real por ingenieros. Y, a pesar de que puedes encontrar aplicaciones móviles que pueden ser utilizadas con tu vehículo y ayudarte a sentirte todo un piloto de fórmula 1, lo más interesante de esta tecnología es que se implementa en el área de la salud. Encontrar que se hizo mal o que se hizo bien con la configuración del auto de fórmula 1, es uno de los retos de una escudería, estas personas no tienen tiempo que perder. Es por eso que el equipo McLaren a través de su filial McLaren Electronics que se encarga de la telemetría de sus fórmula 1, implementaron su tecnología en el hospital de Birmingham; y desde hace varios años la telemetría apoya en la prevención de ataques cardíacos de recién nacidos, mejorando no solo la capacidad de monitoreo sino la capacidad del personal médico de predecir y anticiparse a cualquier tipo de situación. De igual forma podrás encontrar algunas aplicaciones móviles que te ayudarán a sentirte un piloto de fórmula 1, al recoger los datos de tu vehículo.
La fórmula 1 seguramente seguirá siendo un deporte más para ti, pero a partir de aquí, de seguro que será un deporte más interesante para seguir en el futuro, especialmente porque es un deporte donde la inversión en investigación y desarrollo es todo un ejemplo para otras empresas y naciones de todo el mundo.
