Por: Isabella Wang
Doctoranda en estudios Políticos e Internacionales
Universidad del Rosario
Mi nombre es WANG YU-HSUAN, pero los extranjeros suelen tener dificultades para pronunciar mi nombre, entonces tengo un nombre postizo en español que es Isabella. Mi nombre en chino de hecho no tiene mucho significado, los nombres en chino no necesariamente tiene un significado específico sino que inventamos los nombres para que suenen bonito y se vean bonito con los caracteres. En mi caso y seguro también para muchos otros, el nombre lo ha elegido un adivino. Mi abuela le ha preguntado qué nombre pone para equilibrar mi destino, para que toda mi vida tenga mucha salud, paz, fortuna y suerte. Entonces según la hora, el día, y el año que nací, hay ocho palabras para que el adivino calcule y elija un nombre para desear una buena vida.
Soy taiwanesa, el nombre oficial de mi país es República de China, y cuidado que no es la China grande sino la isla tropical pequeña que queda arriba de Filipinas, cerca de Hong Kong, debajo de Corea del sur, a la izquierda de Japón. Hablo chino mandarín y taiwanés. Y sobre la separación de China y Taiwán es un drama que llena de intrigas, de amor y odio, elementos perfectos para poner a las diez de la noche en los canales televisivos, hoy no voy a explicar a profundidad el tema, pero dejo un video en inglés para los interesados.
Hasta aquí ya he explicado mucho sobre mi misma, he intentado aclarar y explicar las dudas que suelen tener los extranjeros cuando conocemos de primera vez, aprender un idioma extranjero no es sólo conocer la cultura extranjera para mí sino que también me ha obligado a reflexionar sobre mi lengua materna y mi cultura, y claro siempre hay muchas alegrías y chistes o tragedias en el aprendizaje de las lenguas.
Chistes como por ejemplo, confundo palabras como sandalia con sandía, ardilla con rodilla, (imagina la reacción de mi amigo Alberto cuando le dije: “mira, en este prado siempre hay muchas rodillas” y no podía aguantar la risa cuando supo lo que quería decir de verdad), y más como biblioteca y bicicleta, cangrejo y canguro.
Algunos ejemplos que uno percibe de algunas características interesantes de la cultura propia es cuando la gente me pregunta cómo se dice buenas tardes en chino mandarín, y tuve que responder que en chino no saludamos así, hay una forma de decir buenos días, buenas tardes, buenas noches, pero en la vida real, cuando encontramos a una persona, no le decimos buenas tardes ni buenas noches para saludar. Es más frecuente encontrar buenos días como saludos en Taiwán, pero buenas tardes y buenas noches para saludar, quizás en la televisión que los presentadores hablan de esa forma. Y sí cuando la gente se va a dormir, dice buenas noches. No usamos usted tanto porque cuando queremos expresar mucho respeto, tendemos a usar un tono muy suave y cariñoso cuando hablamos y añadimos muchas palabras de cortesía y eufemismos en la frase. Y una cosa curiosa en chino en Taiwán, no usamos «ni hao» para saludar a los amigos. Usamos «hello», «hi» como en inglés, y se sentirá muy raro si uno usa «ni hao» entre amigos.
Y la tragedia es que antes una persona me dijo que me haces falta, como no entendía qué significa, lo interpreté como “a esa persona le he hecho algo mal”, así que me estaba quejando, en lugar de pensar que me estaba diciendo que “te he echado de menos”.
En resumen, aprender un idioma extranjero te ayuda a fortalecer la memoria, tienes menos posibilidades de sufrir alzheimer. Así mismo, aprendes otra cultura, y al mismo tiempo, da oportunidades de reflexionar. Si te resultan atractivas esas ventajas que he mencionado, aprende un idioma por favor, porque te aseguro que encontrarás más alegría que tragedia en ese camino.